Una correcta alimentación es algo que debemos extender a lo largo del año sin ningún tipo de excepción, pero hay momentos en los que una u otra razón nos llevan a descuidarnos un poco. Ahora que llega la primavera y que comienza el buen tiempo vemos una oportunidad perfecta para volver a ponernos en forma y tomarnos en serio la idea de alimentarnos de manera adecuada. Para ello os vamos a dar 5 consejos que consideramos imprescindibles.
1. Vitaminas y líquidos todos los días
Hay determinadas sustancias que vamos a necesitar para encontrarnos bien y luego no sufrir situaciones en las que podamos sentirnos mal. Las vitaminas y los líquidos tienen que ser fundamentales. Para lo segundo el agua resulta obligatoria, pero también os recomendamos introducir zumos naturales en el día a día. Estos os beneficiarán para recibir una mayor dosis de vitaminas y estaréis logrando matar dos pájaros de un tiro. La fibra será otra de esas cosas que también os ayudará mucho y os permitirá tener un equilibrio en vuestras distintas comidas.
2. Come menos, pero más veces
A veces nuestro pensamiento de comer a unas determinadas horas y en un bloque estipulado de momentos nos puede producir situaciones problemáticas. Hay que intentar ser un poco más flexibles y, sobre todo, escuchar a nuestro organismo. No se trata de estar todo el día comiendo cosas que no debamos, sino de conseguir que el cuerpo tenga aquello que necesita. Por eso, si nos pide comer más a menudo, lo podremos hacer, asegurándonos siempre de que sea una ingesta sana y que la cantidad que comamos no resulte demasiado elevada.
3. Cocinemos bien
No hay momento del año en el cual os vayamos a recomendar cocinar de forma poco sana, pero en primavera tenéis que hacerlo todavía más. Comienza el calor y tenéis que aseguraros de comer muy sano y esto significa comenzar a cocinar de una manera más natural. Utilicemos menos aceite, pasemos a prescindir de grandes cantidades de sal y pasemos a optar por la cocina al vapor. Si salimos de nuestra zona de confort veremos que hay muchas técnicas para cocinar que pueden ser útiles tanto para potenciar el sabor como para que nuestro organismo esté mucho más sano.
4. Digestiones más fáciles
Los ritmos y las horas de las cenas dependen mucho de nuestras costumbres, pero lo que os tenemos que pedir es que cenéis varias horas antes de iros a la cama. Esto permitirá que hagáis la digestión en condiciones y que esta no le afecte a vuestro cuerpo en un momento crítico en el cual puede aumentar mucho el peso que adquiramos. Si cenáis pronto y luego tenéis que tomar alguna cosita pequeña antes de dormir será preferible a que os vayáis a la cama con el estómago muy lleno.
5. Adiós a los alimentos malignos
Y sobre todo, mantengamos muy a raya aquellos alimentos que durante la primavera pueden ser unos auténticos dolores de cabeza para nosotros. Por ejemplo, las grasas, los fritos, los embutidos o la comida picante. Todo ello mejor muy lejos y es preferible que ni pensemos en ello para no sufrir tentaciones.
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