martes, 16 de diciembre de 2014

Eyaculación precoz, un problema tabú que tiene solución


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Si hiciéramos una encuesta a los hombres preguntando si padecen de eyaculación precoz, la inmensa mayoría negaría la mayor. Sin embargo, las estadísticas arrojan datos muy diferentes. Al menos uno de cada tres hombres la padece en algún momento de su vida, lo que suele derivar en disfunción eréctil (que llegan a padecer el 50% de los hombres). En el género masculino la sexualidad está íntimamente ligada a la virilidad. Fallar en la cama suele suponer un trauma psicológico que deriva en ansiedad, depresión y falta de apetito sexual, como consecuencias más comunes, pero ¿cuáles son las causas?

Tipología

Se pueden establecer dos tipo de anomalías relacionadas con la eyaculación precoz: una primaria u otra secundaria. La primaria se diagnostica cuando el problema se ha tenido desde siempre el paciente. En estos casos las causas suelen ser naturales, provocadas por una enfermedad, por ejemplo. La prudencia invita a visitar al médico en todos los casos, pero especialmente en cuando el problema siempre ha estado presente.
Cuando se han mantenido relaciones sexuales con normalidad a lo largo de años, y llegado un momento se comienza a experimentar la eyaculación precoz, se denomina secundaria, y suele asociar a causas mentales y psicológicas, encontrando en esa faceta la solución.

Causas

La eyaculación precoz puede estar originada por causas físicas, como son la inflamación de la próstata o la uretra, no estar operado de fimosis o características fisiológicas como el prepucio corto que sobreestimula y provoca la eyaculación.
Las causas psicológicas también están detrás de este problema propio de los hombres. Relaciones con una nueva pareja, ansiedad, preocupaciones o simplemente el cansancio suelen ser las causas más habituales. En estos casos es el hombre quien puede localizarla y actuar para solucionar el problema. Por ejemplo, si es por cansancio basta con modificar los horarios en los que practicar el sexo, prefiriendo la primera hora del día o los días de descanso.

Prevenir y solucionar

La pareja es clave para atajar este tipo de problemas y el diálogo una herramienta fundamental. La pareja ayuda a perder el miedo a fracasar y evitar la ansiedad y el estrés por no llegar juntos.

Otra solución pasa por incrementar la frecuencia de la relaciones, para retrasar paulatinamente la eyaculación. Aunque como siempre recomendamos acudir al médico y pedir la orientación de un especialista, la eyaculación precoz puede ser consecuencia de un problema mayor.

Publicado por Samuel Donn

Samuel es un estudiante de medicina de 23 años, apasionado por el deporte y la vida sana. Aunque su pasión superior es la tecnología y las redes osciales. Publica en este blog con cariño y ¡mucha salud! (y que dure...)

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