Meterse en un bañera
de hielo para recuperarse de un entrenamiento. Hablamos de este
tema. Un masaje corporal o beber un batido de proteínas puede ayudar
a recuperarnos después de un ejercicio muy intenso.
Pero, no pocos atletas
profesionales se apuntan a éso, a meterse en un bañera de hielo
para recuperarse de un entrenamiento.
Según cuentan, hay una gran diferencia. Explicamos cuáles:
Después de un ejercicio
físico intenso, tu cuerpo necesitará de una 'reparación física'
para tu próxima sesión de entrenamiento. Mientras tu cuerpo elimina
el exceso de ácido láctico, meterse en un
bañera de hielo para recuperarse de un entrenamiento ayudará
a llevar oxígeno más rápidamente a tus músculos.
Disfunción
El
ácido láctico genera una disfunción en el sistema muscular que
hace que sea ineficiente. Algo que puede llevar directamente a la
fatiga muscular. Meterse en un
bañera de hielo para recuperarse de un entrenamiento reducirá
la inflamación de los músculos mientras se evacúa el ácido
láctico de manera natural.
Y es que, con el agua
fría, los vasos sanguíneos se contraen, y, al salir del baño, los
vasos se vuelven a dilatar llevando más rápidamente el oxígeno a
los músculos que así se recuperan más rápidamente.
Tanto da si lo que se
utiliza son bolsas de hielo, agua fría o cubitos de hielo flotando
en el agua de la bañera para hacer el mismo efecto.
Es
importante que te sumerjas en la bañera con el torso sumergido hasta
el cuello para controlar la situación, si quieres puedes tomar una
infusión caliente o leer algo mientras te relajas. Pero, ¡ojo!,
puedes permanecer en sesiones de diez minutos, una o dos, pero nunca
más. Saliendo del agua a intervalos, entre una y otra, si eliges dos
sesiones para éso, meterse en un
bañera de hielo para recuperarse de un entrenamiento.
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